Riad Dar Attika es un lugar encantador. Las habitaciones son acogedoras, con una decoración típica de Marruecos que realmente te hace sentir en casa. La terraza es perfecta para relajarse y disfrutar del sol, y la comida es deliciosa, sobre todo para aquellos que quieren probar la auténtica cocina marroquí. Además, su proximidad a la plaza Jemaa El Fna facilita explorar la ciudad.

La cama era un poco dura.

El desayuno en la terraza era

exquisito y una gran forma de empezar el día. El personal fue muy amable y servicial, especialmente Nadia y Faisal. Sin embargo, la limpieza de algunas áreas comunes, como la terraza, podría mejorarse para hacer la experiencia aún más agradable.

El personal era amable y servicial durante nuestra estancia.

La habitación donde nos hospedamos tenía un fuerte olor a humedad, lo cual hizo que nuestra estancia fuera incómoda. Además, el desayuno era bastante básico, y la variedad era limitada, lo que me decepcionó después de escuchar buenas críticas. Por último, el hecho de que nos cobraran por imprimir documentos fue una sorpresa desagradable. me parece que es algo que debería ser un servicio gratuito en un alojamiento.

Hospitalidad auténtica en Marruecos

La ubicación era ideal, a solo 8 minutos a pie de la plaza Jemaa El Fna. Me encantó la atención del personal, siempre sonriente y dispuesto a ayudar.

A pesar de la buena experiencia, el desayuno podría ser más variado. Algunos días, me sentí un poco limitado en opciones, como que solo había pan y un par de pasteles.

El servicio fue excelente durante toda la estancia.

Ubicación tranquila cerca de la plaza.

habitaciones acogedoras con un encanto especial

excelente ubicación, atención excepcional

ventana pequeña

la terraza estaba un poco sucia. aunque el desayuno era abundante y delicioso. el personal era muy amable y servicial, además la ubicación es ideal para conocer la ciudad. recomiendo este lugar para una buena experiencia en marrakech.

el riad es súper bonito y la decoración está top, la verdad. la ubicación es genial, a un paseíto de la plaza principal, y el staff es muy cool, siempre atentos. el desayuno estaba rico y el ambiente era muy chill, así que descansar fue fácil. la experiencia en general fue muy buena, volvería sin dudarlo.

lo único malo fue que la cama era un poco dura y cobraron impuesto diario que no sabíamos.

El riad tiene una decoración exquisita y un ambiente increíble. La atención del personal fue excepcional, especialmente Faisan, quien siempre estuvo dispuesto a ayudarnos. La terraza es perfecta para desayunar con vistas, y el silencio en las habitaciones garantiza un buen descanso.

La limpieza dejó mucho que desear. Durante toda nuestra estancia, notamos que no se pasaba la escoba en las áreas comunes, y al llegar, las tazas del desayuno estaban pegadas a los platos. Además, los precios de las cenas eran exorbitantes en comparación con opciones cercanas.